El Hombre en el Castillo o las realidades alternas de Philip K. Dick
¿Qué hubiera ocurrido si Alemania y Japón hubieran ganado la Segunda Guerra Mundial? Philip K. Dick ensaya una posible respuesta a este interrogante en El Hombre en el Castillo que es considerada la ucronía más importante de la ciencia ficción y por la cual el autor recibió el premio Hugo en 1963.
Temas como política, cultura, racismo, religión y misticismo son abordados a lo largo de la novela. Pero también, al igual que en otras tantas obras suyas, Dick vuelve sobre aquello que tanto lo obsesionó: la realidad.
Temas como política, cultura, racismo, religión y misticismo son abordados a lo largo de la novela. Pero también, al igual que en otras tantas obras suyas, Dick vuelve sobre aquello que tanto lo obsesionó: la realidad.
Vale aclarar primero qué es una ucronía para aquél lector desprevenido o desacostumbrado a este término. Una ucronía es una historia ficticia en la cual se elige un hecho real ocurrido en el pasado y se modifica su resultado histórico para luego especular con las consecuencias de ese cambio. Las ucronías son conocidas también como novelas históricas alternativas.
En El Hombre en el Castillo cuyo nombre original es The Man In The High Castle, el curso histórico ficticio se desvía del real en el año 1933, donde Dick introduce el asesinato del presidente de los Estados Unidos Franklin D. Roosvelt. Esto provoca que la gran potencia del norte no pueda terminar de salir de la Gran Depresión y así, el gobierno que continúa el mandato instaura una política aislacionista en la que Estados Unidos se mantiene al margen de la guerra en Europa. De esta manera, los países Aliados son arrasados por Alemania en el Viejo Continente y Japón derrota en el Pacífico a Estados Unidos.
La novela fue publicada en 1962 y la historia se desarrolla en esa misma época. Dick imagina a Estados Unidos separado en tres partes. Los alemanes tienen bajo control la costa Este y los japoneses la costa Oeste. En el medio, quedan algunos estados independientes que sirven de separación para evitar una frontera caliente ya que una especie de guerra fría se ha desatado entre las dos potencias victoriosas.
Hitler ha muerto y en su lugar asumió un nuevo jerarca que pronto dejará su posición de poder para dar paso a otro. Los personajes políticos mencionados en la novela son muchos de los líderes nazis que se suicidaron en la realidad al finalizar la Segunda Guerra Mundial o fueron juzgados y condenados por sus crímenes en el juicio de Nüremberg.
En tanto, los campos de concentración ya son de conocimiento público y son el destino de todos aquellos que los nazis eligen. Continúan con el genocidio y han dejado al borde de la extinción a los judíos. En África han hecho lo propio con la población negra. El Mar Mediterráneo ha sido drenado y mientras envían naves espaciales a la Luna y Marte, Japón recién logra avances en la conquista de Sudamérica. La diferencia entre las dos potencias se hace evidente y se acentúa más en el hecho de que Alemania posee armas nucleares y Japón aún no.
En la novela no hay una historia principal, sino que hay varias líneas argumentales que se van desarrollando desde el principio al fin y que en algunas partes se entrelazan.
Una de las historias es la de un espía alemán que viaja encubierto al Oeste de Estados Unidos en una misión secreta. Otra trata de un vendedor de antigüedades norteamericano y su relación con los japoneses ocupantes. Entrelazada en algunos puntos con esta, está la historia de dos trabajadores de metales que intentan comenzar un negocio que fabrique piezas de joyería que representen la nueva cultura americana. Un poco apartada aparece la aventura de la ex-esposa de uno de los trabajadores con un desconocido.
Uno de los puntos de contacto en cada una de las historias, es que los personajes comentan y leen un libro que se llama La Langosta se ha Posado el cual es una ucronía dentro de la ucronía. El libro, escrito por un tal Hawthorne Abdensen, especula con la posibilidad de que Alemania y Japón hayan perdido la guerra. Pero no describe nuestra realidad, sino otra en la que Inglaterra termina dominando el mundo tras vencer a Estados Unidos en una guerra económica. Desde ya, este es un libro prohibido por los nazis. Uno de los personajes principales se obsesiona a tal punto con el libro que decide emprender un viaje hasta la casa del autor, quien se dice, vive en un castillo fuertemente custodiado por él mismo ya que teme ser asesinado por los nazis. De ahí el título de la novela.
Muchos temas recorre Philip K. Dick en el transcurso del libro. Define, por un lado, la parte política y deja en claro la aberración del régimen nazi y lo horroroso que hubiera sido un mundo en el que hubieran triunfado. Por otro lado, aborda el tema de la cultura y cómo esta se detiene cuando una nación pierde una guerra. Además, toca el tema del racismo e imagina un mundo donde las ideas nazis sobre las razas son una verdad incuestionable para todo el mundo.
Otro punto de contacto entre los personajes es el uso (o abuso) del I Ching, el oráculo chino que usan los japoneses. En la historia, los norteamericanos lo han adoptado y los personajes principales lo consultan continuamente para conocer su futuro. El mismo Philip K. Dick contó que escribió el libro utilizando el I Ching y dejó que la suerte de sus personajes estuviera sujeta a los designios místicos. Tiempo después se arrepintió de ello, pues no quedó conforme con el final de la novela.
Se dan tres realidades alternativas en El Hombre en el castillo: la de los personajes que viven en un Estados Unidos ocupado; la descrita en el libro La Langosta se ha Posado; y nuestra realidad, la de los lectores. Hacia el final del libro, Dick vuelve sobre este tema de la realidad que tanto lo ha apasionado y la somete al I Ching. La respuesta obtenida termina siendo sorprendente.
Quien esté pensando en leer esta novela, debe saber antes que no se encontrará con un libro donde las potencias del mundo luchan por la supremacía y en medio se desatan tramas conspirativas. El Hombre en el Castillo está mucho más cerca de ser una distopía (la inversa de una utopía, al estilo de 1984, de George Orwell), que una novela de suspenso tecnológico al estilo de Tom Clancy.
El Hombre en el Castillo, como ya se ha dicho, es la ucronía más importante de la historia de la ciencia ficción y representa el prototipo de novela de este sub-género. Es sin duda digna de ser leída y de ocupar un lugar en nuestra biblioteca personal.
En El Hombre en el Castillo cuyo nombre original es The Man In The High Castle, el curso histórico ficticio se desvía del real en el año 1933, donde Dick introduce el asesinato del presidente de los Estados Unidos Franklin D. Roosvelt. Esto provoca que la gran potencia del norte no pueda terminar de salir de la Gran Depresión y así, el gobierno que continúa el mandato instaura una política aislacionista en la que Estados Unidos se mantiene al margen de la guerra en Europa. De esta manera, los países Aliados son arrasados por Alemania en el Viejo Continente y Japón derrota en el Pacífico a Estados Unidos.
La novela fue publicada en 1962 y la historia se desarrolla en esa misma época. Dick imagina a Estados Unidos separado en tres partes. Los alemanes tienen bajo control la costa Este y los japoneses la costa Oeste. En el medio, quedan algunos estados independientes que sirven de separación para evitar una frontera caliente ya que una especie de guerra fría se ha desatado entre las dos potencias victoriosas.
Hitler ha muerto y en su lugar asumió un nuevo jerarca que pronto dejará su posición de poder para dar paso a otro. Los personajes políticos mencionados en la novela son muchos de los líderes nazis que se suicidaron en la realidad al finalizar la Segunda Guerra Mundial o fueron juzgados y condenados por sus crímenes en el juicio de Nüremberg.
En tanto, los campos de concentración ya son de conocimiento público y son el destino de todos aquellos que los nazis eligen. Continúan con el genocidio y han dejado al borde de la extinción a los judíos. En África han hecho lo propio con la población negra. El Mar Mediterráneo ha sido drenado y mientras envían naves espaciales a la Luna y Marte, Japón recién logra avances en la conquista de Sudamérica. La diferencia entre las dos potencias se hace evidente y se acentúa más en el hecho de que Alemania posee armas nucleares y Japón aún no.
En la novela no hay una historia principal, sino que hay varias líneas argumentales que se van desarrollando desde el principio al fin y que en algunas partes se entrelazan.
Una de las historias es la de un espía alemán que viaja encubierto al Oeste de Estados Unidos en una misión secreta. Otra trata de un vendedor de antigüedades norteamericano y su relación con los japoneses ocupantes. Entrelazada en algunos puntos con esta, está la historia de dos trabajadores de metales que intentan comenzar un negocio que fabrique piezas de joyería que representen la nueva cultura americana. Un poco apartada aparece la aventura de la ex-esposa de uno de los trabajadores con un desconocido.
Uno de los puntos de contacto en cada una de las historias, es que los personajes comentan y leen un libro que se llama La Langosta se ha Posado el cual es una ucronía dentro de la ucronía. El libro, escrito por un tal Hawthorne Abdensen, especula con la posibilidad de que Alemania y Japón hayan perdido la guerra. Pero no describe nuestra realidad, sino otra en la que Inglaterra termina dominando el mundo tras vencer a Estados Unidos en una guerra económica. Desde ya, este es un libro prohibido por los nazis. Uno de los personajes principales se obsesiona a tal punto con el libro que decide emprender un viaje hasta la casa del autor, quien se dice, vive en un castillo fuertemente custodiado por él mismo ya que teme ser asesinado por los nazis. De ahí el título de la novela.
Muchos temas recorre Philip K. Dick en el transcurso del libro. Define, por un lado, la parte política y deja en claro la aberración del régimen nazi y lo horroroso que hubiera sido un mundo en el que hubieran triunfado. Por otro lado, aborda el tema de la cultura y cómo esta se detiene cuando una nación pierde una guerra. Además, toca el tema del racismo e imagina un mundo donde las ideas nazis sobre las razas son una verdad incuestionable para todo el mundo.
Otro punto de contacto entre los personajes es el uso (o abuso) del I Ching, el oráculo chino que usan los japoneses. En la historia, los norteamericanos lo han adoptado y los personajes principales lo consultan continuamente para conocer su futuro. El mismo Philip K. Dick contó que escribió el libro utilizando el I Ching y dejó que la suerte de sus personajes estuviera sujeta a los designios místicos. Tiempo después se arrepintió de ello, pues no quedó conforme con el final de la novela.
Se dan tres realidades alternativas en El Hombre en el castillo: la de los personajes que viven en un Estados Unidos ocupado; la descrita en el libro La Langosta se ha Posado; y nuestra realidad, la de los lectores. Hacia el final del libro, Dick vuelve sobre este tema de la realidad que tanto lo ha apasionado y la somete al I Ching. La respuesta obtenida termina siendo sorprendente.
Quien esté pensando en leer esta novela, debe saber antes que no se encontrará con un libro donde las potencias del mundo luchan por la supremacía y en medio se desatan tramas conspirativas. El Hombre en el Castillo está mucho más cerca de ser una distopía (la inversa de una utopía, al estilo de 1984, de George Orwell), que una novela de suspenso tecnológico al estilo de Tom Clancy.
El Hombre en el Castillo, como ya se ha dicho, es la ucronía más importante de la historia de la ciencia ficción y representa el prototipo de novela de este sub-género. Es sin duda digna de ser leída y de ocupar un lugar en nuestra biblioteca personal.
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El principal motivo por el que hice este blog fue porque quiero que las personas sepan del maravilloso mundo que son las letras. Escribir y leer son unos de los principales medios de comunicación, y la gente se vale de ellos para saber de lo que los rodea. Desgraciadamente no son medios muy utilizados y hace falta que nos introduzcamos en este hábito. Busco que las personas que no acostumbran leer, logren encontrar algún tipo de lectura que los cautive y para los que quieren escribir y no se animan, ayudarlos a seguir sus ideas y expresarlas, porque nada resulta más gratificante que saber nuestros pensamientos escritos como parte de nosotros. Así que los invito a explorar esta página en la que encontrarán muchas cosas interesantes que nos ayudarán a lograr lo que queremos. Podrán encontrar además, información sobre libros recientes, recomendaciones, opiniones, y consejos.
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